Este artículo se ocupa de la imagen antiturca desarrollada en las arquitecturas efímeras entre 1560 y 1620 en las fiestas públicas de diversas ciudades castellanas, como Madrid, Toledo, Burgos y Valladolid, a través del análisis de sus relaciones festivas. Por un lado, se trata de rastrear y analizar la imagen mediatizada que del turco-otomano tenía la sociedad castellana en la Edad Moderna. Por otro, se pretende describir la evolución de dichas representaciones, centrándonos en el proceso (histórico) de formación de la imagen del “otro” y, en particular, de sus estereotipos figurativos, cargados de contenidos negativos.